Gina Cruz Blackledge. Senadora por el PAN

¿Para qué ingresaste a la política? ¿Cómo tomaste la decisión de iniciar tu carrera en este ámbito?Ingresé a la política con el anhelo y la convicción de que era posible cambiar a México por medios pacíficos, participando en la toma de decisiones de asuntos trascendentales para la definición de nuestro futuro. Mis inicios fueron a través del Partido Acción Nacional en Baja California, como militante y luego como servidora pública y legisladora. Consideré que, para participar era indispensable hacerlo desde una oposición seria, responsable y con tradición de lucha y prestigio moral.¿La razón por la que entraste en la política hoy sigue siendo la misma?Muchas cosas han cambiado con el tiempo, pero mi anhelo por servir a mi Estado natal y a mi país siguen estando presentes todos los días. Mis hijos son una motivación importante, porque pienso en su futuro y me siento con la obligación de dejarles un mejor México del que yo heredé.¿Qué tanto has hecho eso que pensaste y que te falta aún por hacer?He podido ocupar diferentes espacios de decisión, desde el gobierno y la administración pública, en el servicio exterior como cónsul en Calexico y como legisladora local y federal. Muchos han sido los proyectos que he podido poner en marcha, pero las condiciones actuales de mi estado y de mi país me obligan a seguir trabajando para lograr el cambio que tanto anhelan millones de personas. ¿Cuáles son tus momentos clave en tu trayectoria política? Un primer momento clave en mi carrera fue cuando me incorporé al gobierno de Baja California, como servidora pública en 1993 en el área de Asentamientos Humanos y Obras Públicas. Una experiencia importante fue también mi en función como oficial del Registro Civil en 1998, experiencia que me permitió tener un contacto directo con las personas, sus anhelos y necesidades. Otro momento que quiero destacar es mi nombramiento como cónsul en Calexico en 2011, ya que me permitió entrar en contacto con nuestra comunidad en el exterior. También debo resaltar mi primera experiencia legislativa, como diputada federal en 2001 y como diputada local en el Congreso de mi Estado en 2007, donde fui la primera mujer en presidir la Comisión de Hacienda y Presupuesto. Y en la LXIII Legislatura, de igual manera fui la primera mujer en presidir la Comisión de Hacienda y Crédito Público. El más reciente momento clave es cuando me convertí en la primera senadora por Baja California por el PAN, en el año 2018. Mi madre ha sido una fuerza determinante en mi vida, quien me ha guiado y orientado siempre. Mi padre, porque me enseñó el valor de la perseverancia, el esfuerzo y el compromiso social. Debo destacar también a mi familia, mi hijo y mi hija, quienes son un aliciente permanente para seguir con mi dinámica de trabajo y entrega, ya que pienso en ellos y en su futuro. A la Madre Teresa de Calcuta. Admiro su integridad y entereza, así como su entrega y el gran amor que demostró por su país y por la humanidad. Fue una mujer que encarnó los más altos ideales de servicio y entrega y por ello, justamente ha sido reconocida como santa.¿Cuáles han sido los avances en materia de equidad de género ocurridos en el país durante el último año que consideras más importantes? ¿En el mundo?Durante el último año se dieron avances en materia de participación de las mujeres en candidaturas en los procesos electorales locales de Aguascalientes, Durango, Hidalgo, Oaxaca, Quintana Roo y Tamaulipas. Quiero destacar que Aguascalientes está siendo gobernado por vez primera por una mujer emanada de las filas del PAN. También Quintana Roo tuvo su primera gobernadora en 2022. ¿Cuáles son los principales retos para las mujeres para acceder a espacios de toma de decisiones? Las mujeres enfrentamos varios retos importantes. El primero se da a nivel municipal, donde todavía hay cientos de municipios que nunca han sido gobernados por una mujer. También debe avanzarse en la paridad en los poderes legislativos locales mediante acciones afirmativas para las candidaturas. Hay que destacar que en 2019 se aprobó, en el Poder Legislativo, una reforma para lograr la paridad total en la administración pública y en los Poderes de la Unión. Para lograr la tan anhelada paridad se requieren todavía medidas legislativas y administrativas para hacer frente al reto de las pocas oportunidades que todavía tenemos las mujeres para acceder a espacios de decisión del más alto nivel. ¿Qué les aconsejarías a otras mujeres que están entrando o por entrar a la política? Yo les recomendaría que se preparen día a día. La tarea política demanda dedicación total, estudio profundo y un compromiso diario con la profesionalización y la ética pública. La política es una actividad que puede cambiar la vida de las personas y para ello, debemos estar totalmente comprometidas.¿Cuándo lograremos la paridad política en el país? ¿Qué nos falta aún?La paridad es un gran anhelo que requiere no sólo cambios legales, también medidas administrativas, cambios internos en los partidos políticos y una nueva cultura de la participación de las mujeres en todos los espacios de decisión. Hoy la paridad en el Poder Legislativo Federal es una realidad, por ello, debe seguirse el ejemplo de qué se hizo para lograrla, como son las acciones afirmativas, la obligación de los partidos a postular candidatas en distritos competitivos y las fórmulas con paridad total. Estoy convencida que la aspiración debe ser que llegue el día en que no se requiera las cuotas para lograr la paridad total.¿Te ha dejado satisfecha el papel de las mujeres gobernadoras en el país?Es un poco pronto para evaluar la actuación de muchas gobernadoras que acaban de llegar, pero en general me siento honrada de que en estados como Aguascalientes o Chihuahua haya una gran aceptación por sus gobernadoras, y resultados tangibles y esperanzadores. ¿Has sufrido discriminación en tu profesión por ser mujer?Hasta el momento no he sufrido alguna forma de discriminación, pero sí sé de casos en los que se ha dado, por ello, la lucha contra cualquier forma de discriminación no puede ni debe terminar. ¿Hay apoyo de las mujeres hacia nuestras mujeres gobernantes o candidatas?Sin duda. Muchas madres de familia y mujeres trabajadoras ven con esperanza que una mujer encabece el gobierno o un cargo de responsabilidad y toma de decisiones y que dé buenos resultados para sus familias. ¿En qué momento te has sentido apoyada por el género opuesto? En toda mi carrera política he sentido el apoyo de hombres y mujeres que han creído y confiado en el trabajo.Hay una mujer presidenta de la SCJN, ¿qué deja de bueno esto para el género en relación con el poder y como se puede ayudarla desde las trincheras en la que estás?El hecho de que una mujer esté al frente de la Corte nos da un ejemplo de que sí se puede llegar a las más altas esferas del poder. Su actuación también, en la medida en que se apegue al derecho y defienda nuestro orden jurídico será, sin duda, motivo de orgullo e incentivo para miles de mujeres, y lo más importante es que ha logrado ese nombramiento por su capacidad y no por su logro.¿Por qué es importante tener más mujeres en el poder?Porque aportamos una visión especial de la política, llevamos valores como el amor y el trabajo con nosotras, así como la dedicación y la entrega. Las mujeres sabemos bien cómo cuidar a otras personas y esta enseñanza también la llevamos al gobierno, al cuidar del bien común de nuestras comunidades.¿Cómo has apoyado las causas feministas? He estado presente apoyando con mi voz y con mi voto a todas aquellas propuestas que busquen promover la participación de las mujeres y acabar con las lamentables brechas salariales que todavía se dan. Así como sumándome a las acciones que desde la sociedad civil se convocan para el apoyo de otras mujeres.¿Está México preparado para tener una mujer presidenta?No sólo México está preparado, hoy tenemos el mayor número de gobernadoras de nuestra historia y ellas están dando ejemplo de que sabemos gobernar y de que gobernamos de forma responsable y comprometida. ¿Cuál será el papel de la mujer en la elección de 2024? La participación de la mujer es fundamental y determinante para fijar el rumbo del país, con una visión de futuro, de prosperidad, de crecimiento, seguridad para nuestras familias pero sobre todo buscando la unidad de las y los mexicanos.