
Nombre completo: Laura Alejandra Álvarez Soto
Cargo: Diputada local
Afiliación política: PAN
Estado: Ciudad de México
Con una pasión más que por la política, por servir, inició su carrera a los 18 años en su natal Querétaro. Como diputada en la capital del país, ha impulsado proyectos en favor de las infancias, quienes son parte de su agenda prioritaria junto con la juventud, en materia de educación, seguridad y salud.
Cree en la alternancia, así como en dejar de lado las diferencias entre partidos, pues deben ser el medio para que los ciudadanos accedan a la política y para que el país experimente verdaderos cambios.
Mantiene una comunicación constante mediante redes sociales y en persona, consciente de que debe mantenerse cercana a la ciudadanía para conocerla a fondo y saber a dónde dirigir sus acciones para mejorar sus vidas.
- ¿Qué fue lo que te llevó a iniciar el camino en la política y no en otra carrera?
Empecé muy jovencita, como a los 18 años, en política. Mi primera gran oportunidad fue en un gobierno de mi municipio en Pedro Escobedo, en Querétaro. Ahí me di cuenta de que sí es posible transformar vidas haciendo buena política y buen gobierno.
Me enamoré de la posibilidad de usar los recursos públicos para servir a la gente. Te diría que más que la política, lo que me cautivó fue el servicio público. De hecho, mi lema de trabajo, ahora como diputada local es “¡Pasión por servir!” y con esa pasión imprimo todo lo que hacemos.
Ahora entiendo que la política es necesaria para poder llegar a ser gobierno y por eso he participado en política, pero siempre la he entendido como instrumento. Mi motivación principal es servir y ser diputada me abre un espectro más amplio para hacerlo.
- ¿Hubo algún personaje en específico que te inspiró para entrar al servicio público?
Cuando empecé en este camino, el jefe Diego era una figura que no sólo debatía temas públicos con absoluta capacidad, sino que también había incursionado en el ejercicio del gobierno. Me parecía muy admirable su elocuencia, su tenacidad y su capacidad para persuadir y mover almas con su palabra y su ejemplo.
- ¿Ha cambiado la forma de hacer política en comparación con cuando te iniciaste en ella?
Mucho. Yo empecé a involucrarme en política poco antes de la transición democrática. En ese momento la pluralidad, la democracia, el fortalecimiento institucional eran anhelos sociales. Hoy, la política pareciera ya no una lucha de ideas y proyectos de país, sino un espacio de lucha por el poder. Antes teníamos proyectos políticos que se debatían con respeto a la pluralidad; hoy se busca imponer mayorías muchas veces sin razón. Los partidos deben volver a ser los canales naturales para que los ciudadanos puedan acceder a la política, recuperar el valor de la palabra, de la búsqueda de consensos y de la verdad. Creo que la visibilidad de las redes sociales ha llenado la política de estridencia, que es contraproducente para arreglos sociales responsables.
- Para ti, ¿qué es lo bueno, lo malo y lo feo de estar en política?
Lo bueno es la posibilidad permanente de mejorar realidades y de poder ayudar a las personas. Es lo bueno y es muy bueno. Lo malo es que es cuando las mayorías impiden el ejercicio de la política, su esencia, que es la negociación. Hoy, por desgracia, se impone la voz de una mayoría que se construyó de manera artificial y eso perjudica la democracia. Hoy, en lugar de diálogo hay una batalla permanente. Y lo feo son las dinámicas que no respetan a los interlocutores, que no respetan las reglas y que destruyen la República y los contrapesos.
- ¿Cuál consideras que es el mayor reto de México en la actualidad?
Volver a plantear un proyecto de nación compartido. Creo que la concentración excesiva de poder en el partido en el gobierno ha roto acuerdos que son necesarios para la vida en comunidad. En la medida en que los contrapesos se debilitan y la concentración de poder es tan alta, se generan incentivos contrarios a la cooperación. En México vivimos más de 130 millones de personas, todas merecen tener una voz en el rumbo del país.
- ¿Cómo te imaginas a México en 2030?
Veo un futuro complicado. Será la siguiente renovación del poder presidencial y esperaría que para entonces se haya fortalecido el país, se hayan garantizado derechos, exista la posibilidad de alternancia, si la gente así lo desea. Tenemos que trabajar todos los días para construir ese país, en donde además haya prosperidad compartida. No se ve tan cerca, pero habemos muchos comprometidos con ello.
- ¿Ves alternancia o perpetuidad?
Veo una sociedad polarizada. Por un lado, voces agradecidas por los programas sociales y otras voces que exigen un cambio. Creo que sobre todo el 2027, en que habrá elecciones intermedias, será determinante para saberlo, pero es muy importante garantizar que las instituciones democráticas mantengan su fortaleza, de tal forma que ambos sean escenarios posibles. La decisión debe siempre ser de la gente. La presidenta pronto presentará una reforma político-electoral, confío en que no sea un instrumento para destruir la pluralidad, sino una propuesta que permita una democracia más eficaz y menos costosa.
- ¿Qué te llevó a sumarte a tu partido?
Fue mi primer acercamiento a la política y la verdad es que no me veo militando en ningún otro partido. El PAN ha sido mi casa, aquí conocí a mi esposo, aquí he servido y he sido representante. El PAN es, desde mi perspectiva, el partido que mejores gobiernos ha dado, que se ha preocupado por fortalecer instituciones, que ha buscado la estabilidad económica, la ampliación de derechos, como la salud, promovió la transparencia, etc. El PAN no gobernó para hacerse de más poder, sino para hacer un mejor país. Llevó la democracia, que era su convicción, a las instituciones de gobierno.
- ¿Cuál consideras que ha sido tu mayor aportación al servicio público o desde tu trinchera?
Un proyecto que me llena de orgullo es haber logrado que en la alcaldía Benito Juárez el 100% de los CENDIs, que son los centros donde se cuida a los niños, fuesen seguros. Los sacamos de los mercados públicos y los instalamos en sitios adecuados para ofrecer seguridad a los niños y a sus mamás. Todos me decían que iba a ser imposible, pero logramos coordinar un equipo, convencer a muchas personas y dimos los resultados. Eso ayudó a la gente, pero también me acercó a la agenda de las infancias que hoy es la principal que encabezo.
- ¿Quién es tu figura política modelo a seguir?
Una de las mujeres políticas más destacadas en el mundo contemporáneo es la alemana Angela Merkel. Pienso que es una mujer que demostró un enorme liderazgo que superó su país y tuvo un gran impacto en toda Europa. Tuvo una mezcla muy interesante en la toma de decisiones de pragmatismo y estabilidad.
Ahora bien, hay cientos de miles de mujeres que están marcando ejemplo en todo el mundo todos los días. No siempre con el interés mediático, pero la política es el espacio de lo que compartimos. Quienes estamos involucrados en una comunidad más resiliente, más armónica, etc., hacemos política. Algunas políticas informales, digamos, pero son un ejemplo para sus hijos, sus familias y sus comunidades.
- ¿Qué ley propondrías o mejorarías para impactar positivamente al país, considerando los retos actuales?
Ahora, como legisladora local, quiero aprovechar cada minuto y cada sesión para presentar propuestas. Las prioridades que hemos perseguido han sido mejorar la vida de las personas, especialmente de niños y adolescentes de la capital. Estoy impulsando acciones contra el robo de niños, contra los narcocorridos para protegerlos de ese tipo de contenidos que hacen apología del delito; estoy impulsando una reforma para que en México se regule el uso de celulares en las escuelas para evitar bullying y rezago educativo, como lo han logrado hacer en Alemania, España y Francia. También tengo una agenda muy activa en materia de seguridad contra la extorsión y mejorar la salud mental, a favor de los espacios públicos y los servicios públicos dignos; y no voy a dejar de alzar la voz contra la corrupción.
- ¿Y a nivel local?
A nivel local quiero lograr la firma de un Pacto por las Escuelas Positivas para detectar y atender problemas en la situación psicológica y emocional de los niños. Necesitan este apoyo cada vez más para combatir la depresión, la ansiedad y prevenir el suicidio. Estoy segura de que pronto lo vamos a lograr.
- Hoy con toda la información y plataformas, comunicar se ha vuelto un reto y más en política. ¿Cómo haces tú para mantener informada a la ciudadanía de tus actividades?
Tengo una actividad muy intensa en redes, sobre todo Instagram y Tik Tok. Trato de dar a conocer todo mi trabajo, para que vean que soy una diputada comprometida, que todo el tiempo está abriendo oportunidades de programas, por ejemplo, de abasto a precio accesible, pláticas, clases, etc. Mi módulo de atención ciudadana se llama “Casa Soluciones MH”, es muy activo, tiene una vida comunitaria intensa y, por supuesto, la actividad legislativa. Trabajo con mi equipo para sacar todo lo que hacemos, pero a veces nos gana el ciclo de las redes. Es complicado estar documentando y al mismo tiempo haciendo, pero es parte de la rendición de cuentas, así que síganme para estar en contacto.
- ¿Consideras que el país está mejor o peor que antes?
Creo que peor en términos de que se han cancelado los grandes acuerdos institucionales: los contrapesos están en riesgo y sabemos por experiencia, que siempre que hay concentración de poder, hay abuso. Nuestra misión es alertar sobre esto y actuar para garantizar un escenario que vuelva a valorar la pluralidad.
- ¿Cómo te ves para 2030?
Trabajando. Por las cosas que creo que están bien, por mi país, por la CDMX. La verdad es que desde que empecé a trabajar, no he dejado de hacerlo y no creo dejar de hacerlo. Tenemos muchos pendientes que nos necesitan.
- ¿Qué es lo más valioso de México y tu estado?
La gente. La gente, sin ninguna duda. Yo hago recorridos prácticamente todos los días y la gente que conozco es mi principal fuente de inspiración. No hay gente más solidaria, más trabajadora y más noble. Es un honor que me abran la puerta de sus casas y de sus vidas para trabajar en equipo.
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